El arte al servicio de la seguridad

El arte al servicio de la seguridad

Sinfónica, 103 años cantando en los días de gloria y llorando en los de luto.
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​En 1912, el entonces direc­tor de la Policía, Gabriel González López, con su visión humanista, decidió fundar la Banda Sinfónica de la Institu­ción, como una forma de resca­tar, preservar y divulgar la he­rencia y los valores de la cultura musical de Colombia y el mun­do y contribuir al fortalecimien­to de la imagen institucional al acercarse al ciudadano a través de este bello lenguaje universal, para crear espacios de conviven­cia y participación ciudadana. Se inició con 13 agentes afi­cionados a la música, bajo la dirección del maestro José del Carmen Aguilera. Cientos de bogotanos concurrían a la Pla­za de Bolívar para escuchar sus conciertos. Al año siguiente pasó a manos del también maestro Pedro Mo­rales Pino, quien logró sumar 17 nuevos integrantes y, en 1914, tomó su batuta el gran maestro Dionisio González, quien la di­rigió por 31 años, hasta el día de su muerte. En 1965, bajo la dirección del maestro Jesús Pinzón Urrea, la Sinfónica presentó uno de sus más hermosos trabajos disco­gráficos, 'Himnos y marchas de Colombia', tan solo comparable con el estrenado en 2010, en el que sus músicos grabaron des­de 'Campesina santandereana' y 'La virgen de la Macarena' hasta 'Brisas del Pamplonita' y 'Piel canela', presidida por el maes­tro japonés Tetsuo Kagehira. Por todo esto, el Congreso de la República le otorgó la Orden Pe­dro Nel Ospina Vásquez al "em­prendimiento, productividad y creatividad". Hoy la integran 63 músicos pro­fesionales, a la cabeza del maes­tro Miguel Ángel Casas Barreto, capaces de interpretar desde sin­fonías de Beethoven hasta valle­natos, quienes en el último año han ofrecido 159 conciertos para más de 70 mil asistentes. Ante la desaparición de bandas tan importantes como las sinfó­nicas Nacional, Distrital y De­partamental del Tolima, la Banda Sinfónica de la Policía Nacional se mantiene viva, como máxima expresión del arte al servicio de la seguridad. Es frecuente verla pasar de ame­nizar un cumpleaños institucio­nal a despedir a valientes poli­cías sacrificados en la guerra. Por eso siempre se ha dicho que la Sinfónica lleva 103 años can­tando en los días de gloria y llo­rando en los de luto.Periódico PNC